El ciclista alemán ha sido suspendido por dopaje en el pasado.
El Movistar Team ha dado un golpe inesperado en el mercado al incorporar a Michel Hessman, ex ciclista del Jumbo-Visma, quien todavía cumple una sanción por un positivo con diuréticos. Aunque la UCI ha confirmado el fichaje, este no será oficial hasta el 16 de enero debido a restricciones legales.
Un refuerzo con sombra de polémica
Hessman, clave en el triunfo de Primoz Roglic en el Giro de Italia 2023, fue sancionado tras detectar una cantidad mínima de clortalidona en su orina durante un control fuera de competición. Las agencias antidopaje, incluida la AMA, concluyeron que el positivo podría deberse a medicamentos contaminados como ibuprofeno o paracetamol. Sin embargo, el alemán ha estado apartado de la bicicleta desde entonces.
Podrá volver a competir a partir del 14 de marzo, pero su contrato con Movistar, de dos años, comenzará oficialmente mañana, según ha adelantado el equipo navarro.
¿Qué busca Movistar con este fichaje?
Hessman será la pieza número 29 de una plantilla que busca reconfigurarse tras bajas sensibles y con refuerzos que apunten a mantener al equipo en la élite del ciclismo mundial. Con su capacidad como gregario en grandes vueltas y experiencia en escenarios de alta presión, el alemán podría ser un activo valioso para los de Eusebio Unzué.
Un fichaje arriesgado pero estratégico
Aunque el pasado sancionador de Hessman genera dudas, Movistar parece confiar en la resolución del caso y en el potencial del corredor. Esta apuesta refleja las necesidades del equipo por fortalecer su bloque tras años de rendimiento irregular.
Queda por ver si Hessman logrará disipar las dudas y convertirse en un pilar clave en la estrategia del equipo para 2025. Por ahora, el tiempo dirá si el riesgo mereció la pena.
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