Fenerbahce hizo sudar a su afición en casa, pero cerró el partido con un golpe de autoridad para vencer 90-73 a un ALBA Berlín que se permitió soñar durante tres cuartos.
Sertac Sanli, el “Coloso de la pintura”, lideró a los locales con 18 puntos, bien secundado por Marko Guduric y Nigel Hayes-Davis, quienes sumaron 14 cada uno y pusieron hielo al nervio en los momentos decisivos. Sanli fue claro: “Jugamos más como equipo al final. Así debemos hacerlo siempre”.
El último cuarto fue un clinic de baloncesto. Con un parcial de 14-2, los turcos apagaron cualquier chispa de rebelión alemana. Yanni Wetzell, el “Artillero inesperado” de ALBA, llegó a poner a los suyos al frente con un triple (67-66), pero fue un espejismo. Fenerbahce apretó el acelerador y cerró con un contundente 29-13 en el periodo final.
Por ALBA, Gabriele Procida (14 puntos) destacó en otro partido de lucha sin premio. Con un récord de 3-17, el colista de la EuroLeague sigue sin encontrar su rumbo.
Mientras, Fenerbahce mejora su registro (12-7) y mantiene el radar en la zona alta. Eso sí, si quiere pelear con los grandes, deberá evitar regalar minutos como lo hizo esta noche. En el baloncesto, despertar tarde puede costarte caro.