La Virtus no ha permitido comprar entradas a los fans baskonistas para el duelo de este viernes.
El Saski Baskonia ha expresado su malestar tras el rechazo a su solicitud de entradas para sus aficionados en el partido de Euroliga contra la Virtus Bolonia el 10 de enero. Según el comunicado, las autoridades locales italianas han prohibido la venta de entradas a los seguidores visitantes, algo que el club considera contrario al espíritu deportivo y los valores de igualdad en la competición.
Este tipo de medidas, aunque buscan prevenir incidentes, también limitan la experiencia de los aficionados y afectan la esencia del baloncesto como un deporte que une culturas. Baskonia, conocido por su fiel afición, destaca la importancia de la presencia de sus seguidores en momentos clave, tanto para el apoyo al equipo como para enriquecer la atmósfera deportiva.
La decisión ha generado debate, ya que restringir la asistencia en función de la procedencia parece un paso atrás en el objetivo de fomentar la convivencia y el respeto en el deporte.